JUDAS EL DESAGRADECIDO
DAVO ISCARIOTE
Por: Pedro Cárdenas Rojas
Para nadie es un secreto siendo habitante del municipio de Sahagún, la mala administración que se evidencia en el mandato de Jorge David Pastrana Sagre, popularmente conocido como Davo. Hoy son muchos los comentarios poco alentadores expresados alrededor de su gestión, calificada por muchos de sus coterráneos como pésima, si no, la más mala vivida por ellos hasta el momento.
Hay total decepción en aquellos que lo apoyaron y le dieron la oportunidad cuando por tercera vez colocó su nombre a consideración para regir los destinos de su municipio. Éste desaliento es producto de promesas incumplidas, el estancado desarrollo y el estado de abandono que se percibe en todas sus calles, parques y vías rurales.
A esta altura del partido, se podría decir, que, no es sólo una traición a sus promesas y a su programa de gobierno, sino, a todo un pueblo que lo escogió esperanzado en que Sahagún siguiera con el desarrollo en el que venía destacándose a nivel regional por poseer una infraestructura moderna y superior a la de cualquier pueblo vecino. También se podría decir que es una traición al bienestar de su gente, a las vías urbanas y rurales deterioradas, a la bendita promesa eterna del agua que ha sido uno de los flagelos más grandes que los sahagunenses han padecido, ya éste liquido vital no llega ni con mediana regularidad, no se avanzó en ese tema, antes por el contario decayó el sistema.
En lo urbano, un municipio de mucho renombre como Sahagún, es penoso no tener señales de transito optimas y semáforos en perfectas condiciones. Una secretaría de transito que no cumple con las mínimas condiciones de prevención, de atención y de reacción cuando ocurren accidentes cotidianos y muchas veces tristemente mortales. La secretaría ha servido para el rebusque del secretario de turno y de sus familiares, que decepción.
En el tema de seguridad, es evidente el miedo que invade a gran parte de los habitantes extorsionados día a día sin importar que tan grande o pequeño sea su negocio y prefieren callar y pagar por la falta de autoridad y control permanente en el territorio sahagunense. ¿Por qué teniendo una estación de policia y CAI distribuidos a lo largo del pueblo, para la seguridad y el control de los habitantes éstos han quedado de lujo, mal mantenidos y solos? ¿Quién ofrece tranquilidad en ese tema, no es el Burgo Maestre como la máxima autoridad del municipio?. Entonces, ¿Es el alcalde autoridad para disponer del presupuesto a sus anchas panchas pero es nulo cuando de alzar la voz y tomar medidas contundentes para acabar con éste flagelo se trata?. Las instituciones educativas en huelgas constantes por falta de seguridad y de inversión. ¿Que pasa entonces?. ¿Dónde está el cuidado de las obras entregadas hace 7 años por el presidente de turno? ¿Será porque eso no le da ganancias o no las hizo él en su mandato no vale la pena mantenerlas? ¿ Ese es el amor y el sentido de pertenencia que decía y dice tener por el pueblo que confió en él para llevarlo a un nivel superior?¿Será que usted comprobó, en carne propia, que es más fácil hablar que hacer? Tanto que criticaba a los otros mandatarios y hoy, usted, está perdiendo el año pero sin la más mínima posibilidad de recuperación.
Hoy, tristemente, sólo nos quedó el titulo ganado en otros tiempos como el segundo municipio de Córdoba y el décimo a nivel Costa Caribe.
Hoy, sólo le queda a los sahagunenses las redes sociales para expresarse con memes a manera de protesta sana, su descontento y su decepción por su fracasada administración.
Hoy en día, la gente sólo comenta y se lamenta del error que fue darle la oportunidad a un Judas mas que vio la alcaldía no como una oportunidad de hacer el bien a su pueblo, el que le ha dado todo, sino que la utilizó para adquirir lo que jamás había tenido. Este señor es tan descarado que sin sonrojarse quiere imponer candidato en cuerpo ajeno para seguir con sus malos propósitos y practicas, no sin antes patear a la ñoñamanía quien lo ayudó a conseguir su sueño tan esquivo.
Que pena haber luchado tanto para conseguir un sueño y pasar a la historia no como el mejor sino como el DAVO ISCARIOTE moderno, aquel que a su paso traicionó todo lo que a boca llena, antes, promulgaba y valoraba.
